El aumento de tamaño que se produce en tu pecho durante el embarazo requiere que lo cuides más que nunca. Te contamos cómo.
Cómo prevenir las estrías en el embarazo
Al principio, notará un ligero aumento de tamaño y un leve estiramiento o dolor.
Las venas que lo atraviesan, que apenas se notaban hasta ahora, se hicieron visibles.
Los pezones también cambian: se volverán más grandes y sensibles, tendrán un color más oscuro.
Las molestias menores deberían desaparecer en el segundo trimestre, pero los senos seguirán creciendo durante el embarazo y el parto, y es probable que tengas dos tallas más que tu sostén.
Si mimas tu pecho durante el embarazo, las secuelas serán mínimas. Las que más preocupan a las gestantes son las estrías.
Cuando aparecen son rojas, pero con el tiempo se va matizando el color hasta acabar siendo nacaradas, casi del tono de la piel. También el brusco aumento de volumen es el responsable de la flacidez y la caída de las mamas.
Y es que la glándula mamaria no tiene más sujeción que la propia piel, por lo que si tiene que soportar más peso, es lógico que vaya cediendo y los senos cayendo.
Hacer ejercicio, hidratarte y llevar un buen sostén son los tres pilares de tu cuidado durante y después del embarazo, y tu mejor arma contra las consecuencias físicas.
Pero no los únicos Te damos la clave para exponer lo menos posible tus pechos a todos los cambios que sufrirán durante estos meses.
Fortalece tus músculos. La natación es un gran deporte que no solo fortalece los músculos alrededor de las glándulas mamarias, sino que también alivia otros inconvenientes, como la pesadez en las piernas. Debes hacer ejercicios específicos para mantener el tono de esta zona y evitar el bochorno temeroso.
Por ejemplo: sentado o de pie, con la espalda recta, las palmas juntas sobre el pecho durante un máximo de 5 segundos; Repita 12 repeticiones en dos series. Sobre todo, debes ser regular y hacer este ejercicio hasta 4 veces por semana.
Almendra dulce y rosa mosqueta. Aplicar una crema altamente hidratante al menos una vez al día para mejorar la elasticidad de la piel y prevenir la descamación y las estrías.
Elige productos de la línea madre, los ingredientes perfectos para este período y la crema antiestrías.
También está indicado un masaje circular con aceite de almendras dulces -rico en vitamina E- o aceite de rosa mosqueta, que mejoran la elasticidad de la piel y previenen la aparición de estrías.
Para preparar la piel sensible de los pezones para la lactancia, se debe aplicar diariamente en la areola aceite puro de vitamina E.
- Sujetador duradero y cómodo. Cómodo, sujeta bien, no comprime y tiene el tamaño justo para el busto. Elige tejidos naturales - que no irriten la piel - con tirantes anchos y sin trabillas.
- Recuerda que es muy importante cambiar el tamaño a medida que tus senos aumentan de tamaño.
- También se recomienda por la noche, especialmente en las últimas etapas del embarazo y los primeros días de lactancia.
Yin e hidrata. Tome una ducha tibia y termine con una ligera neblina de agua fresca, no demasiado fría, alrededor de sus senos para unir las fibras elásticas de la piel.
Utilice un jabón neutro que no reseque ni irrite la piel.
cuidados de los senos en la lactancia materna
A medida que su leche aumenta, notará una plenitud en sus senos e incluso el dolor disminuirá muy rápidamente, una vez que la producción de leche se ajuste al ritmo de succión de su bebé.
Lo permanente pueden ser dolorosas grietas o rasguños que aparecen en los pezones. A continuación te damos algunas claves para aliviar las molestias así como prevenir la flacidez que puede provocar el vaciado y llenado constante de tus senos.
- El bebé está acostado en una buena posición al pecho. Los profesionales médicos se aseguran de que aparezcan grietas cuando se amamanta al bebé en una posición incorrecta durante la alimentación.
- La tetina debe estar entre la boca del bebé y la parte delantera del estómago del bebé para evitar que el bebé succione de un lado de la boca.
- Limpia con tu propia leche. La leche materna tiene propiedades nutricionales que previenen las grietas y ayudan a que cicatricen. Después de amamantar, ponga unas gotas en el pezón y déjelo secar al aire.
Sostén de maternidad. Lo más importante es que se adapta a los cambios de tamaño del pecho, y por supuesto integra un sistema de apertura fácil y cómodo, con una ventana que permite un apoyo óptimo durante la lactancia. Elija aquellos con correas ajustables anchas y cierres de gancho doble en la parte posterior que le permiten ajustar en 2 o 3 posiciones.
Cremas para combatir grietas. Estos productos para pezones se deben comenzar varios meses antes de la fecha de parto y son totalmente compatibles con la lactancia. Sus componentes no dañarán tu leche ni a tu bebé.
Aplicar después de la alimentación y eliminar los residuos antes de la alimentación.
Tableta absorbente. Si usa un protector de lactancia, elija el que tenga la mejor absorción. Recuerde que la humedad favorece el proceso de agrietamiento. Colócalo debajo de tu sostén y cámbialo cada vez que lo encuentres mojado.
Después del nacimiento
¿Es cierto que después de amamantar pierdes más que antes del embarazo? Puede suceder, pero no es el resultado más común. Una vez que la glándula mamaria ha completado su trabajo de alimentar al bebé, comienza a encogerse y encogerse, y la piel alrededor del seno, que se ha estirado en los últimos meses, parece más grande que la propia glándula mamaria. se vuelve "vacío".
- Hoy en día, los cosméticos, los tratamientos de belleza y el ejercicio son las mejores herramientas para que las nuevas mamás recuperen la belleza de sus senos.
- Por ejemplo, hacer ejercicios de Pilates da muy buenos resultados, así como nadar.
- Pero si no quieres o no puedes ir al gimnasio, puedes hacer ejercicios de pecho en casa: sujeta una pelota en la mano, ponla sobre el pecho y presiona con fuerza.
- Para comenzar, repita el ejercicio de 12 a 16 veces. Con el tiempo, puede aumentar el número de combinaciones.
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